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Es el símbolo que ves por todas partes cuando paseas por Mojácar, en las casas y por las calles, todas las tiendas de recuerdos lo venden, pero ¿cuál es su origen y qué significa? Son varias las teorías sobre este curioso muñeco, emblema de la provincia de Almería y, en particular, del municipio de Mojácar. Os contamos lo que se sabe sobre él.
El indalo representa una figura humana con los brazos extendidos, sosteniendo una especie de arco.
Su origen se suele atribuir a una figura rupestre del Neolítico tardío o Edad del Cobre, encontrada en la Cueva de los Letreros, en la falda del monte Maimón, cerca del municipio almeriense de Vélez-Blanco. (Visitas guiadas)
Algunas teorías apuntan a un origen divino de la figura, defendiendo que lo que ésta sostiene entre sus manos es el arco iris o la bóveda celeste. Apoyando esta teoría encontramos el origen de la palabra “indal” que, en el lenguaje íbero, significa dios grande, fuerte, poderoso, protector o mensajero de los dioses. Además, en la cueva se ha encontrado otra figura muy característica, conocida como “el brujo”, que parece representar un hombre con una especie de cornamenta.
Durante siglos, el indalo ha sido considerado un tótem y un símbolo de buena suerte y protección, en el norte y levante de la provincia de Almería, especialmente en Mojácar. En las puertas de las casas mojaqueras se pintaba la figura del indalo con almagre, para proteger a sus habitantes de las tormentas y el mal de ojo. Tanto era así, que el indalo llegó a ser conocido como “el muñeco mojaquero”. Y el hecho es que Almería es una de las provincias con menos lluvia y más luz de toda la península.
Sin embargo, el significado del indalo aún no ha sido esclarecido de forma definitiva. Otra teoría sostiene que el dibujo no representa otra cosa que un arquero apuntando hacia el ave que vuela sobre él. Y la denominación de indalo derivaría de San Indalecio, primer obispo y patrón de Almería.
El indalo fue utilizado también como símbolo del Movimiento indaliano, fundado por el pintor y escultor almeriense Jesús de Perceval en 1945. Se trata de un movimiento artístico y cultural, que reivindicaba los valores tradicionales del sur de España y la diferencia cultural almeriense. En sus pinturas se retratan los paisajes de Almería, sus gentes y costumbres, destacando por ser una pintura realista con un intenso uso de la luz y el color.
Las obras de este movimiento se pueden contemplar en el Museo de Doña Pakyta, en la ciudad de Almería, de forma gratuita.
Desde la aparición del movimiento indaliano, Mojácar ha sido el hogar de muchos artistas, contando incluso con una residencia temporal en la que se concentran creadores de distintas disciplinas durante varias semanas. La residencia pertenece a la Fundación Valparaíso, y se ubica a las afueras de Mojácar, en la zona de Las Huertas.
El indalo se puede encontrar hoy en día en cada rincón de Mojácar, desde las fachadas de las casas hasta las barandillas en las calles. Es el símbolo más representativo de la provincia de Almería, y del municipio de Mojácar en particular. Se utiliza igualmente como símbolo de la Costa de Almería.
Está tan arraigado en la cultura almeriense que incluso forma parte del escudo del equipo de fútbol Unión Deportiva Almería. Es posible que les dé suerte, nunca se sabe.